En La Cripta del primer nivel de La Tumba de Turizhas Bôr el grupo fue encontrado por una partida de orcos mientras recuperaban el tesoro de la ánfora, posiblemente atraídos por el ruido de la batalla contra los muertos vivientes. Yakon intentó engañarlos pero no tuvo éxito, y terminaron parlamentando tensamente. Los orcos exigieron una paga que el grupo consideró demasiado alta, y comenzó un combate que solo duró lo que tarda el disparo de una ballesta, ya que las criaturas se dieron a la fuga. Los aventureros intentaron seguirlos y emboscarlos, pero los humanoides se perdieron en las profundidades del lugar y no regresaron. Mientras esperaban, fueron encontrados por tres cien pies gigantes, los cuales fueron despachados rápidamente.
Después de esto, la compañía decidió dejar el lugar y viajar a la fortaleza de Nortumbria para pasar la noche y dividir el tesoro. Recuperaron 100 piezas de oro y 800 de plata, y 60 puntos de experiencia para cada uno, dando un total de alrededor de 180 puntos de experiencia para cada uno. Dos mercenarios cayeron en combate.
Luego decidieron viajar a Malistair para después dirigirse a Branson y finalmente encontrar el lugar que supuestamente yacía al norte de la pequeña aldea, todo esto según la información que intercambiaron con el clérigo en Nortumbria unos días antes. En la ciudad, mientras se reabastecían para el viaje, fueron convocados por un personaje con el nombre de Foroden "El Rojo", un carismático elfo del barrio de los puertos que parece dirigir una suerte de red de matones y corta cuellos que operan en la ciudad. Les ofreció una oferta "que no podían rechazar". Esta consistía en venderle a él todas las armas y armaduras que consiguieran, en lugar de a los mercaderes afiliados a los gremios.
El único inconveniente durante el viaje a Branson fue el mal clima invernal y un desvío que los llevó más al norte de lo que esperaban. Llegaron a la aldea cansados , y comieron una comida caliente y compartiron unos relatos de sus aventuras con los locales. Al final del relato de Yakon, se les acercó un hombre con las ropas de un explorador. Éste les dio una suerte de amenaza disfrazada de advertencia, o al revés, al decirles que Branson era un lugar pacífico, y que cualesquiera que fuesen sus intenciones, que no alteraran la paz ni trajeran atención indeseada de los alrededores a la aldea. Terminado esto, Tarver (pues asi se llamaba), les pagó una ronda de cervezas y se retiro, sin compartirlas con ellos. Todos los integrantes del grupo aceptaron algo sorprendidos, pero no le dieron mucha importancia.
30.4.12
24.4.12
3ª Sesión
El grupo había finalizado la sesión anterior dentro del laberinto bajo la Atalaya de Irwich, en el segundo nivel, luego de una lucha con gnolls y una araña gigante amaestrada. Sin más botín que las armas recuperadas de los oponentes, y dos cuerpos que cargar, emergieron a la superficie y partieron hacia PasoSur, donde pasaron la noche. Allí hicieron cuenta de alrededor de 150 puntos de experiencia para el elfo y el bárbaro.
Al día siguiente iniciaron camino hacia Malistair, y allí tuvieron un encuentro con una mujer y tres hombres de mal aspecto que intentaban robarle o peor. A pesar de que ella se defendió y le rompió la nariz al más grande de ellos de un codazo, no fue rival para los otros dos hombres, pero fue salvada por el grupo, quienes dieron muerte a uno de ellos, los otros dos escaparon. La mujer resultó ser miembro de la orden clerical del Señor de la Maza Blanca, y estaba buscando aventuras fuera de la cocina del monasterio. Decidió unirse al grupo.
Luego de una semana en Malistair la compañía decidió investigar que sería de la Tumba de Turizhas Bôr, por lo que partieron al norte, a la fortaleza de Nortumbria, en un complicado y pesado viaje de dos días, por culpa del mal clima invernal. Una vez allí intercambiaron nombres e información con otro grupo de aventureros, liderado por un clérigo de la Maza Blanca también, de nombre Candor. El clérigo buscaba un lugar llamado Los Salones Oscuros, o Bajomontaña. El grupo no conocía la localización del lugar, pero pensaron que podría estar refiriéndose al complejo bajo la Atalaya de Irwich, por lo que le dieron su localización general (aunque sin decirle que era, para su saber, la Atalaya de Irwich). Al día siguiente partieron a la Tumba de Turizhas Bôr.
El grupo compuesto por Oudenin el elfo, Yakon el guerrero del norte, Almendía la clériga, siete mercenarios, y tres hombres para usos varios, realizaron una incursión a la ya conocida Tumba de Turizhas Bôr. Habían ingresado a ella por última vez más de dos meses atrás. En el poco trayecto lucharon contra dos zombies de ropajes extraños y cuatro esqueletos con armas relativamente en buen estado en la cámara de una estatua sosteniendo una ánfora repleta de monedas, pero que saben que tiene una trampa de gas venenoso.
Mientras quitaban el tesoro de la ánfora con un cucharón, escucharon ruidos fuera del pasillo de la cripta. Como la sesión finalizó dentro del lugar, no han adquirido botín ni PX.
Al día siguiente iniciaron camino hacia Malistair, y allí tuvieron un encuentro con una mujer y tres hombres de mal aspecto que intentaban robarle o peor. A pesar de que ella se defendió y le rompió la nariz al más grande de ellos de un codazo, no fue rival para los otros dos hombres, pero fue salvada por el grupo, quienes dieron muerte a uno de ellos, los otros dos escaparon. La mujer resultó ser miembro de la orden clerical del Señor de la Maza Blanca, y estaba buscando aventuras fuera de la cocina del monasterio. Decidió unirse al grupo.
Luego de una semana en Malistair la compañía decidió investigar que sería de la Tumba de Turizhas Bôr, por lo que partieron al norte, a la fortaleza de Nortumbria, en un complicado y pesado viaje de dos días, por culpa del mal clima invernal. Una vez allí intercambiaron nombres e información con otro grupo de aventureros, liderado por un clérigo de la Maza Blanca también, de nombre Candor. El clérigo buscaba un lugar llamado Los Salones Oscuros, o Bajomontaña. El grupo no conocía la localización del lugar, pero pensaron que podría estar refiriéndose al complejo bajo la Atalaya de Irwich, por lo que le dieron su localización general (aunque sin decirle que era, para su saber, la Atalaya de Irwich). Al día siguiente partieron a la Tumba de Turizhas Bôr.
El grupo compuesto por Oudenin el elfo, Yakon el guerrero del norte, Almendía la clériga, siete mercenarios, y tres hombres para usos varios, realizaron una incursión a la ya conocida Tumba de Turizhas Bôr. Habían ingresado a ella por última vez más de dos meses atrás. En el poco trayecto lucharon contra dos zombies de ropajes extraños y cuatro esqueletos con armas relativamente en buen estado en la cámara de una estatua sosteniendo una ánfora repleta de monedas, pero que saben que tiene una trampa de gas venenoso.
Mientras quitaban el tesoro de la ánfora con un cucharón, escucharon ruidos fuera del pasillo de la cripta. Como la sesión finalizó dentro del lugar, no han adquirido botín ni PX.
16.4.12
La Fosa Común
A continuación se anotarán los mercenarios caídos desde este punto en adelante. Las entradas serán breves y concisas:
- Dorkun, muerto en el primer nivel de la Atalaya de Irwich, por una trampa de mangual en la guarida de un ogro.
- Loyd, muerto a las afueras de la Atalaya de Irwich, por ballesteros orcos.
- Delal, luchaba con un hacha a dos manos, muerto en el segundo nivel de la Atalaya de Irwich por un hachero gnoll.
- Dastaron, soldado de hacha y escudo, muerto por el golpe de un zombie en el primer nivel de la Tumba de Turizhas Bôr.
- Lastas, arquero rufián de los puertos, asesinado en una cripta en el primer nivel por un zombie.
- Almoir, javalinero, muerto por una tarántula gigante de montaña a las afueras de Melzohar.
- Varek-Zhar, hondero de las tribus del norte, asesinado por una tarántula gigante de montaña a unos kilómetros de Melzohar.
- Mercenario de Naylu el Mago, sin nombre, decapitado por un guerrero espectral en el primer nivel de la Tumba de Turizhas Bôr.
- Filimir, ágil luchador afin al uso de las dagas, fue muerto por el veneno de una viuda negra gigante , en un complejo subterráneo al norte de Branson.
2ª Sesión
De Pasosur viajaron a Malistair, con el poco tesoro que habían logrado recuperar. En la ciudad, pasaron alrededor de dos semanas, recuperándose de las heridas recibidas en la última incursión, buscando mercenarios para acompañarlos en futuras aventuras (encontraron a cuatro, pero dos de ellos habían oído hablar del grupo, y no muy bien, por lo que después de una infructuosa "charla de negocios", los potenciales mercenarios declinaron la oferta de trabajo). También pasaron varias noches entre las tabernas del barrio de los puertos, buscando a Mermack y sus matones, quienes habían palizeado y saqueado el lugar en el que vivía Bordôz el enano. A pesar de sus esfuerzos, y las ingentes cantidades de bebidas tomadas para disimular su espera, no pudieron dar con la persona que buscaban. Al comienzo de la tercera semana decidieron ir explorar el segundo nivel del complejo bajo la Atalaya de Irwich.
La compañía, que consiste de Óudenin el elfo, Yakon el guerrero del norte, Bordôz el enano, siete mercenarios, y tres hombres para tareas varias, ingresaron al primer nivel de la Atalaya de Irwich, con el plan de aventurarse hasta el segundo. Intentaron entrar por la escalera más cercana a la salida del complejo, pero una vez en el segundo nivel, ésta llevaba a una puerta cerrada, la que del otro lado era custodiada por orcos (a los cuales Yakon intentó engañar para que le den paso, sin suerte). Luego probaron con otra, pero según el enano, ésta los llevaba a un tercer nivel, debajo del que querían ir. Intentaron finalmente con la última que conocían, y ésta los llevó al segundo nivel de nuevo. Allí exploraron dos cámaras y se encontraron con dos gnolls, aparentemente de guardia, los cuales atrayeron la atención de una escuadra entera de unos seis gnolls más, uno de los cuales tenía como mascota/animal de guerra/prisionera a una araña gigante. La batalla empezó mal para el grupo, y cayeron Bordôz y un mercenario del elfo, pero en un par de asaltos de inflexión la batalla dió un giro, y los aventureros prevalecieron y dieron muerte a todas las criaturas excepto una, que huyó por donde vino.
La partida finalizó con el grupo dentro del complejo, por lo que aún no recuperaron ningún tesoro ni aumentaron sus puntos de experiencia.
La compañía, que consiste de Óudenin el elfo, Yakon el guerrero del norte, Bordôz el enano, siete mercenarios, y tres hombres para tareas varias, ingresaron al primer nivel de la Atalaya de Irwich, con el plan de aventurarse hasta el segundo. Intentaron entrar por la escalera más cercana a la salida del complejo, pero una vez en el segundo nivel, ésta llevaba a una puerta cerrada, la que del otro lado era custodiada por orcos (a los cuales Yakon intentó engañar para que le den paso, sin suerte). Luego probaron con otra, pero según el enano, ésta los llevaba a un tercer nivel, debajo del que querían ir. Intentaron finalmente con la última que conocían, y ésta los llevó al segundo nivel de nuevo. Allí exploraron dos cámaras y se encontraron con dos gnolls, aparentemente de guardia, los cuales atrayeron la atención de una escuadra entera de unos seis gnolls más, uno de los cuales tenía como mascota/animal de guerra/prisionera a una araña gigante. La batalla empezó mal para el grupo, y cayeron Bordôz y un mercenario del elfo, pero en un par de asaltos de inflexión la batalla dió un giro, y los aventureros prevalecieron y dieron muerte a todas las criaturas excepto una, que huyó por donde vino.
La partida finalizó con el grupo dentro del complejo, por lo que aún no recuperaron ningún tesoro ni aumentaron sus puntos de experiencia.
1ª Sesión (del nuevo registro)
Luego de sumar a Bordôz el enano a la compañia, viajar hacia Malistair y rehacerse de víveres y atender otros asuntos, el grupo partió nuevamente hacía el complejo bajo la Atalaya de Irwich, en búsqueda de más botín y para finalizar la exploración del primer nivel.
El grupo compuesto por Óudenin el elfo, Yakon el bárbaro, Bordôz el enano, cinco mercenarios, y tres hombres contratados para tareas varias, se aventuró en el primer nivel de la Atalaya de Irwich. Exploraron unas pocas cámaras y en la zona noroeste del lugar, encontrando tres zombies y destruyéndolos (el enano recibiendo graves heridas en el combate), y un esqueleto con huesos color rojo vino, que al ser decapitado por Yakon, estalló hiriendolo. Por las heridas sufridas decidieron volver a la seguridad de la civilización. Recuperaron un magro botín de 690 piezas de plata (y un puñado aparte de piezas de oro que Yakon se guardó en secreto). Acumularon unos 100 PX cada uno. No hubo ninguna baja.
Viajaron de vuelta a PasoSur y pasaron la noche ahi. Notaron que el otoño estaba llegando a un abrupto fin, dando paso al que parece que va a ser un duro invierno.
El grupo compuesto por Óudenin el elfo, Yakon el bárbaro, Bordôz el enano, cinco mercenarios, y tres hombres contratados para tareas varias, se aventuró en el primer nivel de la Atalaya de Irwich. Exploraron unas pocas cámaras y en la zona noroeste del lugar, encontrando tres zombies y destruyéndolos (el enano recibiendo graves heridas en el combate), y un esqueleto con huesos color rojo vino, que al ser decapitado por Yakon, estalló hiriendolo. Por las heridas sufridas decidieron volver a la seguridad de la civilización. Recuperaron un magro botín de 690 piezas de plata (y un puñado aparte de piezas de oro que Yakon se guardó en secreto). Acumularon unos 100 PX cada uno. No hubo ninguna baja.
Viajaron de vuelta a PasoSur y pasaron la noche ahi. Notaron que el otoño estaba llegando a un abrupto fin, dando paso al que parece que va a ser un duro invierno.
8.4.12
Agosto 2011 a Abril 2012
Uno de los puntos más salientes de las partidas que tuvieron lugares entre finales del 2011 y comienzos del 2012 fue la exploración en su totalidad del primer nivel de La Tumba de Turizhas Bor, a través del esfuerzo conjunto y la sangre de varios aventureros que fueron conformando distintos grupos. El mapa del lugar, manchado con la sangre y el sudor de varios personajes, se encuentra aún en manos del grupo (aunque no en las manos que iniciaron el mapa original). Al lugar se le quitaron sus riquezas más obvias, aunque es posible que aun hayan más tesoros escondidos tras las paredes del complejo, y un segundo nivel (que nadie ha explorado aún) espera bajo el suelo de los lugares ya recorridos.
Con la mayor y última parte de los tesoros de la tumba emergieron el mago Hëndryx y el elfo Oudenin, lo que les ofreció un empuje importante a la hora de conseguir equipo de mejor calidad y bastantes puntos de experiencia, aunque no los suficientes para llevarlos al segundo nivel. Un poco cansados de ese lugar cargado de muerte y malos recuerdos, y también sabiendo que el único lugar obvio que quedaba explotar era el segundo nivel (el cual suele ser más peligroso que el primero), decidieron viajar al sur, a la única ciudad de tamaño considerable de la Baronía: Malistair.
En el lugar conocieron por medio de una venta a un mago, Adriaxas, quien le ofreció al grupo un trabajo: encontrar el ojo de un cíclope menor que necesitaba. Les reveló la localización de un lugar bajo tierra en el cual se había avistado a uno hacía un tiempo, y el mago Hëndryx, el elfo guerrero Oudenin, y un guerrero de nombre Sparda, realizaron varias incursiones en el lugar, muriendo el luchador humano en una de ellas. Otro guerrero, llamado Garlic, tomaría su lugar, y también perecería bajo las garras de un zombie poco tiempo después. Terminarían reclutando a un bárbaro del norte que se hacía llamar Yákon.
Entre asaltos al lugar lucharon contra cucarachas gigantes, esqueletos y zombies, ghouls, un ogro, y orcos, encontraron cadáveres de kóbolds, una estatua demoníaca que exigía un tributo en oro, una cruda estatua de un hombre que pensaba, hablaba, y disfrutaba demasiado el consumo de alcohol. También hicieron un viaje a Nortumbria para buscar mercenarios, y sin saberlo le regalaron la información del lugar a un grupo rival que también habia sido contratado por Adriaxas para buscar el ojo. Les dieron muerte al poco tiempo, a la entrada del lugar, mientras estos salían con mucho tesoro a sus espaldas. También encontraron en el interior del complejo, en una caverna, al cíclope, y le dieron muerte, completando el trabajo y recibiendo una paga de 60 piezas de oro por cabeza, ademas del prestigio para con el mago Adriaxas.
Aún después de terminar la misión, realizaron unas incursiones más al lugar. Lucharon mayormente contra orcos, ademas de unos zombies que escupían un ácido corrosivo a grandes distancias. El mago Hëndryx cayó atravesado por dos virotes cuando acampaban a la salida del lugar, luego de desperdiciar su único conjuro (en un pergamino) restante en un grupo de orcos muy pequeño, y fallando en prever un flanqueo por parte de los ballesteros enemigos.
El grupo reclutó en la pequeña aldea de Pasosur a un enano, Bordôz, quien dijo ser habitante de Malistair, pero abandonó el lugar luego de recibir una brutal paliza por parte de un viejo enemigo, del que espera poder vengarse algún día.
El grupo está compuesto entonces por Oudenin el guerrero elfo, Yákon el bárbaro del norte, y Bordôz el enano. Todos los personajes son de primer nivel, aunque el elfo y el bárbaro están a medio camino en términos de puntos de experiencia.
Con la mayor y última parte de los tesoros de la tumba emergieron el mago Hëndryx y el elfo Oudenin, lo que les ofreció un empuje importante a la hora de conseguir equipo de mejor calidad y bastantes puntos de experiencia, aunque no los suficientes para llevarlos al segundo nivel. Un poco cansados de ese lugar cargado de muerte y malos recuerdos, y también sabiendo que el único lugar obvio que quedaba explotar era el segundo nivel (el cual suele ser más peligroso que el primero), decidieron viajar al sur, a la única ciudad de tamaño considerable de la Baronía: Malistair.
En el lugar conocieron por medio de una venta a un mago, Adriaxas, quien le ofreció al grupo un trabajo: encontrar el ojo de un cíclope menor que necesitaba. Les reveló la localización de un lugar bajo tierra en el cual se había avistado a uno hacía un tiempo, y el mago Hëndryx, el elfo guerrero Oudenin, y un guerrero de nombre Sparda, realizaron varias incursiones en el lugar, muriendo el luchador humano en una de ellas. Otro guerrero, llamado Garlic, tomaría su lugar, y también perecería bajo las garras de un zombie poco tiempo después. Terminarían reclutando a un bárbaro del norte que se hacía llamar Yákon.
Entre asaltos al lugar lucharon contra cucarachas gigantes, esqueletos y zombies, ghouls, un ogro, y orcos, encontraron cadáveres de kóbolds, una estatua demoníaca que exigía un tributo en oro, una cruda estatua de un hombre que pensaba, hablaba, y disfrutaba demasiado el consumo de alcohol. También hicieron un viaje a Nortumbria para buscar mercenarios, y sin saberlo le regalaron la información del lugar a un grupo rival que también habia sido contratado por Adriaxas para buscar el ojo. Les dieron muerte al poco tiempo, a la entrada del lugar, mientras estos salían con mucho tesoro a sus espaldas. También encontraron en el interior del complejo, en una caverna, al cíclope, y le dieron muerte, completando el trabajo y recibiendo una paga de 60 piezas de oro por cabeza, ademas del prestigio para con el mago Adriaxas.
Aún después de terminar la misión, realizaron unas incursiones más al lugar. Lucharon mayormente contra orcos, ademas de unos zombies que escupían un ácido corrosivo a grandes distancias. El mago Hëndryx cayó atravesado por dos virotes cuando acampaban a la salida del lugar, luego de desperdiciar su único conjuro (en un pergamino) restante en un grupo de orcos muy pequeño, y fallando en prever un flanqueo por parte de los ballesteros enemigos.
El grupo reclutó en la pequeña aldea de Pasosur a un enano, Bordôz, quien dijo ser habitante de Malistair, pero abandonó el lugar luego de recibir una brutal paliza por parte de un viejo enemigo, del que espera poder vengarse algún día.
El grupo está compuesto entonces por Oudenin el guerrero elfo, Yákon el bárbaro del norte, y Bordôz el enano. Todos los personajes son de primer nivel, aunque el elfo y el bárbaro están a medio camino en términos de puntos de experiencia.
Re inicio del registro
Muchas cosas han pasado desde los últimos registros de partida. Varios personajes han ido y venido, muchos han caído y algunos se enriquecieron, muchos lugares fueron explorados y muchos de los habitantes de la Baronía fueron conocidos.
En un intento de retomar el registro regular de las partidas, se anotarán a continuación, sin mucho lujo de detalles, los puntos más importantes y algunos resúmenes de las sesiones que han tenido lugar. Luego de completar la última entrada, se retomará el registro constante anterior.
En un intento de retomar el registro regular de las partidas, se anotarán a continuación, sin mucho lujo de detalles, los puntos más importantes y algunos resúmenes de las sesiones que han tenido lugar. Luego de completar la última entrada, se retomará el registro constante anterior.
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